Se viene sistemáticamente persiguiendo a los comerciantes informales y también a los formales situados en barrio que la administración quiere exterminar para adelantar allí planes de reforma urbana. Está bien que se quiera una ciudad ordenada y bien presentada, pero no lo está la represión y el desempleo. Aquélla la herramienta y éste el efecto

Hay detras de todas estas acciones toda una filosofía: el desarrollo urbano frío y desconsiderado por encima del hombre, del hambre y del dolor ajenos. Claro que esto lo tienen que disfrazar con el alambicado lenguaje de la planeación, la defensa del orden y toda la jeringoza apropiada para tranquilizar el sentimiento de jsuticia innato en todo ser humano

Está practicando el señor alcalde de Medellín una política de locales arrasados para crear las condiciones y urbanizar modernamente esos barrios
La Secretaria de gobierno comosiona a la Fuerza Pública para practicar los cierres de los negocios, dizque porque si comisiona a las inspecciones de Policia los afectados tendrían la oportunidad de interponer recursos, lo que demoraría mucho el cierre. osea que la legalidad estorba y el Estado de Derecho es mercancia descontinuada

Periódico El Mundo, Enero 21 de 1994